La diabetes es la enfermedad endocrinológica más frecuente. Es muy difícil determinar la cantidad de pacientes afectados, ya que en muchos casos pasa desapercibida. Se calcula que por cada paciente tratado existe otro sin tratamiento.
La diabetes es una de las enfermedades crónicas más frecuentes en la niñez.
Según estimaciones de la Federación Internacional de la Diabetes, cada año se diagnostica diabetes de tipo I a unos 100 000 niños menores de 15 años, se calcula que cerca del 10% de toda la población diabética pertenece a estos grupos.
Los niños estan siendo cada vez más vulnerables al sobrepeso y a la obesidad a nivel mundial.
Al menos 155 millones de niños en edad escolar en el mundo tienen sobrepeso o son obesos, de acuerdo con la últimas estimaciones de la International Obesity.
Al menos 155 millones de niños en edad escolar en el mundo tienen sobrepeso o son obesos, de acuerdo con la últimas estimaciones de la International Obesity.
ESTE AÑO, EL DIA MUNDIAL DE LA DIABETES ESTÀ ENFOCADO EN LOS NIÑOS Y ADOLESCENTES POR CONSTITUIRSE UN GRUPO DE ALTO RIESGO.
Cada vez son más niños y adolescentes diagnosticados con diabetes tipo dos, deficiencia característica de los adultos.
Las causas son la mala alimentación o la comida “chatarra” que se consume, alta en grasas y carbohidratos, como pizzas, pollo frito, papas fritas, hamburguesas, comida ràpida, además de refrescos y caramelos, y la falta de actividad física están generando que cada vez más niños sufran obesidad o sobrepeso.
Afirma que los padres tienen la idea errónea de que un niño “gordito” es saludable, sin pensar que en un futuro éstos podrían generar obesidad y enfermedades crónicas.
El 99% de los niños presenta síntomas previos a la diabetes como el descenso de peso, cambios en el carácter y decaimiento.
La diabetes es una enfermedad que no puede tomarse a la ligera y el tratamiento en los niños tiene que ser intensivo. “Un niño obeso debe tener controles en forma obligatoria para detectar las subidas o descensos de su nivel de azúcar, de igual manera, la educación de padres e hijos es muy importante”.
La diabetes no es incapacitante si se sabe controlar; cuando no se cambian los malos hábitos provoca daños a los órganos y desmejora la salud. Provoca insuficiencia renal, cardiopatías, trastornos del páncreas, ceguera y otras enfermedades.
Las consecuencias en el deterioro de su salud podrán estarlas viviendo en unos veinte años, cuando sean adultos.
La escuela es clave en la promoción de una alimentación saludable y el ejercicio en niños, porque además de que ahí consumen su lunch, es donde muchos compran su refrigerio, por lo que es el lugar ideal para empezar a cambiar sus hábitos de consumo proporcionándoles productos que los nutran y no sólo les aporten calorías. Además en ellas se puede impulsar el deporte.
Por ello la educación para una vida saludable debe empezar desde la infancia.
Este año el mensaje fuè dirigido a los niños y adolescentes, al igual que a sus padres , maestros y mèdicos, para enfatizar que la diabetes tipo 2 puede ser prevenida manteniendo un estilo de vida y dieta saludables.
Dra. Alma Villarreal Navarrete.
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